MOVIE REVIEW: “The Monkey” (2025)

Synopsis: Bill and Hall are twin brothers who, after finding an old toy monkey that belonged to their father, must deal with a series of horrific deaths that begin to occur around them. In their attempt to get rid of the toy, the brothers grow apart, but they reunite under unexpected circumstances.

Every horror movie that features an inanimate object as its main threat bestows upon this antagonist certain characteristics (physical or behavioral) that make them somewhat unique. This is almost like a trademark in this movie genre, because it's through this trait that the audience can more easily recognize the fear that inhabits that character. In this movie's case, we have a toy monkey with bulging eyes and a pair of drumsticks, which, when struck on a drum, randomly "choose" the people to be murdered.

The toy's "peculiar" appearance truly stands out throughout the movie, even though it's only seen in a few scenes, always maintaining its "imposing" presence as the main threat. The toy's "macabre smile" also helps establish its identity, making this "graphic" aspect of the project a fun watch. This context is well-crafted, and the script capitalizes on it (although it could have done so in a much more interesting way), but the project's positive aspects end there, as everything else is quite tedious.

In the plot, when two twin brothers (Bill and Hall) rummage through their father's old belongings, they find a toy monkey. It doesn't take long for one of them to realize something is wrong when unusual deaths begin to occur around them. Literally, every time someone winds up the toy, the monkey chooses to brutally "murder" someone. When the brothers decide to get rid of the toy, they end up separating and growing up on opposite sides, meeting again years later under horrific circumstances.

The script for this movie is one of the most disjointed and uninteresting things I've ever seen, and I even refuse to believe it's based on a Stephen King short story (which it is, but I'd rather not believe that, and I'll eventually read this story just to make sure it's true). Narratively speaking, nothing works well here, and even though the essence of the plot is diabolically entertaining (something that reminds me of good productions from the 80s and 90s), the result of this project's execution is deplorable from its chaotic beginning.

It all begins with a brief, seemingly didactic explanation of the origin of the "demonic monkey," but everything that follows is a jumble of absurd situations "masked" with a type of dark humor that is anything but effective. The script even tries to play with everyday situations to create “horror gore” scenes with heavier weight and form, but all this plot managed to “pull” out of me were brief moments of involuntary laughter within a context that should have been taken more seriously to become something terrifying within its scope.

No plausible explanation is given to the audience about the monkey's origins, how it was made, or why it's "cursed". There's only a preposterous plot twist to try to justify what kept the two brothers apart for so many years. Amidst all this, there's still room to address some family dilemmas with the depth of a saucer, and all of this is fueled by extremely poor and empty dialogue, delivered entirely by a cast of characters lacking a shred of charisma, which makes this movie even more tedious to watch.

Theo James is the "big name" in the cast, playing a doubly cartoonish and poorly constructed role (as is the rest of the cast, which also includes Adam Scott and Elijah Wood in rather embarrassing cameos). Overall, all the characters are boring and constructed within the well-worn conventions that embrace this movie genre (but here, the use of them is clearly misplaced). Everything gets worse when they need to interact with each other, showing how bad their entire construction is (made even worse by their weak performances).

The Monkey is a flawed blend of horror and comedy ("disguised" as dark humor) that relies on a gory tone (ineffective, because it becomes very banal as the narrative unfolds... nullifying its visual impact, which, by the way, features digital and practical effects of dubious quality) to try to impact the audience, but all it manages to do is waste time. Osgood Perkins directed and wrote this project, and all I wonder is how he managed to star in this doubly bad work. Everything would have been "less bad" if it had been a short movie.

Sinopsis: Bill y Hall son hermanos gemelos que, tras encontrar un viejo mono de juguete que perteneció a su padre, deben lidiar con una serie de muertes horribles que comienzan a ocurrir a su alrededor. En su intento por deshacerse del juguete, los hermanos se distancian, pero se reencuentran en circunstancias inesperadas.

Toda película de terror que presenta un objeto inanimado como su principal amenaza otorga a este antagonista ciertas características (físicas o de comportamiento) que lo hacen único. Esto es casi una marca registrada en este género cinematográfico, ya que es a través de este rasgo que el público puede reconocer más fácilmente el miedo que habita en ese personaje. En el caso de esta película, tenemos un mono de juguete con ojos saltones y un par de baquetas que, al golpearlas con un tambor, "eligen" al azar a las personas que serán asesinadas.

La peculiar apariencia del juguete destaca a lo largo de la película, aunque solo aparece en unas pocas escenas, manteniendo siempre su imponente presencia como principal amenaza. Su macabra sonrisa también contribuye a establecer su identidad, haciendo de este aspecto gráfico del proyecto una experiencia entretenida. Este contexto está bien elaborado y el guion lo aprovecha al máximo (aunque podría haberlo hecho de forma mucho más interesante), pero ahí terminan los aspectos positivos, ya que todo lo demás resulta bastante tedioso.

En la trama, cuando dos hermanos gemelos (Bill y Hall) hurgan entre las viejas pertenencias de su padre, encuentran un mono de juguete. Uno de ellos no tarda en darse cuenta de que algo anda mal cuando empiezan a ocurrir muertes inusuales a su alrededor. Literalmente, cada vez que alguien le da cuerda al juguete, el mono decide "asesinar" brutalmente a alguien. Cuando los hermanos deciden deshacerse del juguete, terminan separándose y creciendo en bandos opuestos, reencontrándose años después en circunstancias terribles.

El guion de esta película es uno de los más inconexos y aburridos que he visto, e incluso me niego a creer que esté basado en un cuento de Stephen King (que sí lo está, pero prefiero no creerlo, y eventualmente leeré esta historia solo para asegurarme de que es cierta). Narrativamente hablando, nada funciona bien, y aunque la esencia de la trama es diabólicamente entretenida (algo que me recuerda a las buenas producciones de los 80 y 90), el resultado de la ejecución de este proyecto es deplorable desde su caótico comienzo.

Todo comienza con una breve explicación, aparentemente didáctica, del origen del "mono demoníaco", pero todo lo que sigue es un batiburrillo de situaciones absurdas "enmascaradas" con un humor negro que es todo menos efectivo. El guión incluso intenta jugar con situaciones cotidianas para crear escenas de “horror gore” con mayor peso y forma, pero todo lo que esta trama logró “sacar” de mí fueron breves momentos de risa involuntaria dentro de un contexto que debería haberse tomado más en serio para convertirse en algo aterrador dentro de su alcance.

No se da ninguna explicación plausible al público sobre el origen del mono, cómo se creó ni por qué está "maldito". Solo hay un plot twist débil para intentar justificar lo que mantuvo separados a los dos hermanos durante tantos años. En medio de todo esto, todavía hay espacio para abordar algunos dilemas familiares con una profundidad inaudita, y todo ello se ve alimentado por diálogos extremadamente pobres y vacíos, interpretados en su totalidad por un elenco de personajes carentes de un ápice de carisma, lo que hace que esta película sea aún más tediosa de ver.

Theo James es el "nombre estrella" del reparto, interpretando un papel doblemente caricaturesco y mal construido (al igual que el resto del reparto, que también incluye a Adam Scott y Elijah Wood en cameos bastante vergonzosos). En general, todos los personajes son aburridos y están construidos dentro de las convenciones habituales de este género cinematográfico (pero aquí, su uso está claramente fuera de lugar). Todo empeora cuando necesitan interactuar entre ellos, mostrando lo mala que es toda su construcción (empeorando aún más sus débiles actuaciones).

The Monkey es una mezcla defectuosa de terror y comedia (disfrazada de humor negro) que recurre a un tono sangriento (ineficaz, pues se vuelve banal a medida que avanza la narrativa, anulando su impacto visual, que, por cierto, incluye efectos digitales y prácticos de dudosa calidad) para intentar impactar al público, pero lo único que consigue es perder el tiempo. Osgood Perkins dirigió y escribió este proyecto, y me pregunto cómo logró protagonizar esta obra doblemente mala. Todo habría sido menos malo si hubiera sido un cortometraje.

Sinopse: Bill e Hall são dois irmãos gêmeos, que após encontrarem um antigo macaco de brinquedo que pertencia ao pai deles, precisam lidar com uma série de mortes horríveis que começam a acontecer ao redor deles. Na tentativa de se livrarem do brinquedo, os irmãos acabam se distanciando, mas se reencontram em circunstâncias inesperadas.

Todo filme de horror que traz como sua principal ameaça algum objeto inanimado, confere a este antagonista algumas características (físicas ou comportamentais) que o torna em algo relativamente peculiar. Isso é quase como uma marca registrada neste gênero cinematográfico, porque é através dela que o público pode reconhecer mais facilmente o medo que habita aquele personagem. No caso deste filme, temos um macaco de brinquedo com olhos bem esbugalhados, e um par de baquetas, que quando tocam em um tambor, aleatoriamente “escolhe” as pessoas que vão ser assassinadas.

O visual “peculiar” do brinquedo realmente consegue se destacar ao longo do filme, ainda que ele seja visto em poucas cenas, mas sempre mantendo à sua “imponência” como ameaça principal. O “sorriso macabro” do brinquedo também ajuda a criar a identidade do mesmo, tornando essa parte “gráfica” do projeto em algo divertido de ser assistido. Esse contexto é bem produzido, e o roteiro consegue tirar proveito dele (ainda que pudesse ter feito isso de um jeito muito mais interessante), mas os pontos positivos do projeto acabam por aqui, porque todo o restante é bastante entediante.

Na trama, quando dois irmãos gêmeos (Bill e Hall) vasculham pertences antigos do pai deles, eles acabam encontrando um macaco de brinquedo, e não demora muito para que um deles perceba que algo está errado quando mortes muito inusitadas começam a acontecer ao redor deles. Literalmente, a cada que vez alguém decide dar corda no brinquedo, o macaco escolhe “assassinar” uma pessoa de maneira brutal. Quando os irmãos decidem então se livrar do brinquedo, eles acabam se separando e crescendo em lados opostos, reencontrando-se anos depois em circunstâncias medonhas.

O roteiro é deste filme é uma das coisas mais bagunçadas e desinteressantes que eu já vi, e eu até me recuso a acreditar que ele seja baseado em um conto do Stephen King (o que de fato ele é, mas prefiro continuar a não acreditar nisso e eventualmente irei acabar lendo este conto apenas para me certificar de que isso é verdade). Narrativamente falando, nada funciona direito aqui, e mesmo que a essência da trama seja diabolicamente divertida (algo que me lembra boas produções das décadas de 80 e 90), o resultado da execução desse projeto é algo deplorável desde o seu início caótico.

Tudo começa com uma breve explicação aparentemente didática sobre a origem do “macaco demoníaco”, mas tudo o que vem depois é um amontado de situações absurdas “maquiadas” por um tipo de humor negro que não de eficiente não tem nada. O roteiro até tenta brincar com situações cotidianas para criar cenas de “horror gore” com peso e forma mais pesados, mas tudo que essa trama conseguiu “arrancar” de mim foram breves momentos de risadas involuntárias dentro de um contexto que deveria ter sido levado mais a sério para se tornar algo aterrorizante dentro do seu escopo.

Nenhuma explicação plausível sobre a origem do macaco, como ele foi feito ou porque ele é “amaldiçoado” é entregue ao público, há apenas um plot twist estapafúrdio para tentar justificar o que manteve os dois irmãos separados por tantos anos. No meio disso tudo, ainda há espaço para tratar de alguns dilemas familiares com a profundidade de um pires e tudo isso é alimentado por diálogos extremamente pobres e vazios, sendo totalmente replicados por uma gama de personagens sem um pingo de carisma sequer, o que torna este filme em algo ainda mais maçante de ser assistido.

Theo James é o “grande nome” no elenco, fazendo um papel duplamente cartunesco e mal construído (assim como o restante do elenco, que ainda traz Adam Scott e Elijah Wood em pequenas participações especiais bem vergonhosas). De modo geral, todos os personagens são chatos e são construídos dentro das já conhecidas convenções que abraçam este gênero cinematográfico (mas aqui, o uso é nitidamente equivocado). Tudo piora quando eles necessitam interagir entre si, mostrando como toda a construção deles é muito ruim (ficando ainda pior por causa das performances fracas).

O Macaco é uma mistura falha de terror e comédia (“disfarçada” de humor negro) que apela para o tom sanguinolento (ineficiente, porque se torna muito banal ao longo do desenvolvimento narrativo... anulando seu impacto visual, que aliás, traz efeitos digitais e práticos de qualidade duvidosa) para tentar impactar o público, mas tudo o que ele consegue fazer é ser uma perda de tempo. Osgood Perkins dirigiu e escreveu este projeto, e tudo o que eu me pergunto é como ele conseguiu protagonizar esse trabalho duplamente ruim. Tudo teria sido “menos pior” se fosse um curta-metragem.